FRACTURA DE MESETA TIBIAL

La meseta tibial es la zona localizada en la rodilla a nivel de la metáfisis tibial proximal. Supone el 2% de todas las fracturas, siendo la meseta tibial externa las más lesionada. Las fracturas óseas a este nivel suelen producirse en traumatismos de alta energía, en pacientes jóvenes, sobre todo en accidentes de tráfico y en ancianos tras traumatismo menores, en el contexto de la osteoporosis.

El paciente presenta antecedente de traumatismo, con tumefacción y dolor en la rodilla, y con impotencia funcional de ésta. Su diagnóstico se realiza por la exploración cínica y radiografía simple. En ocasiones se necesita TAC para valorar de forma correcta la complejidad de la lesión.

En ocasiones estás lesiones se asocian a lesiones ligamentosas, como la rotura del ligamento cruzado anterior o roturas meniscales, en otras ocasiones más graves, con lesiones del nervio ciático poplíteo externo o de la arteria poplítea.

El tratamiento depende del grado de desplazamiento, la afectación articular >2 mm y la estabilidad de la rodilla, pudiendo ser conservador con inmovilización o quirúrgico en casos de desplazamiento o perdida de estabilidad.

El tratamiento quirúrgico depende del tipo de fractura pudiendo ir desde cirugía abierta, con placas, cirugía percutánea asistida por artroscopia , fijación externa… cada caso debe tratarse de forma personalizada.